En la costa noroeste de Fuerteventura se encuentra todo un paraíso a tu alcance: El Cotillo, un pequeño pueblo de pescadores que destaca por su modo de vida sostenible y por no ser epicentro de un turismo de masas. En este lugar, encontrarás la paz que estás buscando gracias a sus playas de arena dorada y agua turquesa, sus relajantes vistas panorámicas desde el castillo, sus estrechas calles y casas vestidas de blanco y su puerto pesquero con muchos restaurantes especializados en pescado fresco.
¿Quieres descubrir un poco más de los rincones que te ofrece El Cotillo? Te dejamos cuatro imprescindibles en tu viaje:
La Playa de la Concha
En realidad se trata de una extensión de pequeñas calas ideales para disfrutarlas en familia. Con una longitud de 220 metros, es una de las más famosas de la isla de Fuerteventura por su tranquilidad y belleza, un lugar donde vivir uno de los atardeceres más bonitos de tu vida.
Por sus aguas en calma y suave oleaje, es una playa adecuada para que los niños jueguen en el mar, concretamente, en los charcos que se forman en los conocidos como corralitos, espacios circulares que forman las rocas sobre la superficie.
La Playa de los Lagos
Al igual que la playa de La Concha, esta playa es una sucesión de calas tranquilas que, en este caso, se extienden hasta Corralejo bordeando toda la costa norte de Fuerteventura. También es perfecta para que acudan familias al completo, todos podrán disfrutar de sus aguas claras y fina arena aunque no sepan nadar. De hecho, en este paraje es habitual dar largos paseos por la orilla ya que la altura del agua es muy baja y no supone ningún riesgo.
El Castillo de Tostón
Un espacio de cultura y con historia en El Cotillo es el Castillo del Tostón, Monumento Histórico-Artístico de Interés Cultural desde 1949. De forma cilíndrica, contaba con tres cañones en su parte superior y actualmente conserva las escaleras y el puente levadizo con cadenas de hierro forjado.
Cuando la Corona de Castilla conquistó la isla, El Cotillo comenzó a ganar en importancia como puerto natural para el comercio de orchilla, cereales y ganado. Esta construcción era utilizada para defender la costa de los piratas bereberes, ingleses y franceses.
En la actualidad es un referente cultural del pueblo. Se puede acceder a su interior para contemplar las vistas que ofrece su mirador y también para disfrutar de las exposiciones temporales que acoge. Es, además, la sede de la oficina de turismo, donde el turista recibirá toda la información para planear sus rutas por Fuerteventura.
A un paso del castillo se encuentra la playa del Tostón, con un oleaje y viento fuertes, por lo que resulta especialmente indicada para practicar deportes acuáticos como kitesurf o windsurf.
El Museo de Pesca Tradicional
Apenas cinco kilómetros separan el pueblo de El Cotillo del Faro del Tostón, lugar en el que se encuentra instalado el Museo de la Pesca Tradicional. En él podrás conocer el significado de la pesca tradicional de la isla, también llamada pesca majorera, y la estrecha relación de los isleños con el mar, motor de la economía local y ejemplo de explotación sostenible de los recursos naturales.
La reconversión cultural de los faros es muy habitual en Fuerteventura en los últimos años, de ahí que se hayan convertido en espacios abiertos al público con una finalidad didáctica y de difusión de la vida local de una manera interactiva a través de audios, paneles y reproducciones. La visita al Museo incluye, además, la subida a una de las torres del faro para poder disfrutar del entorno, con un alto valor paisajístico.
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