Por lo general, al hablar de Fuerteventura, rápido nos imaginamos de vacaciones tomando el sol en una de sus espectaculares playas de arena blanca y aguas cristalinas, y alojados en una de esas villas de lujo que hay en la isla. Sin duda, es un destino idílico para disfrutar de unos días de relax con clima agradable en cualquier época del año y, especialmente, en verano. Pero además de destino idílico, también es uno de los destinos vacacionales más completos de nuestro país porque tiene muchos museos y monumentos en Fuerteventura que ver, y muchas actividades para hacer.
Al ser la isla de mayor longitud del archipiélago canario, está repleta de cultura y de historia. Destacan monumentos como la Iglesia de Betancuria o la estatua de ocho metros de altura perteneciente al escritor Miguel de Unamuno, que se ubica en el pueblo de Tindaya en el volcán ‘Montaña Quemada’.
En la localidad de Betancuria y alrededores está el monumento de los guanches, que es impresionante. Tienen un dimensión sorprendente y, cómo no, es un lugar muy divertido para hacerse una buena foto.
Hacia el norte de la isla majorera, en el municipio denominado La Oliva, hay un conjunto de edificaciones que, si te gusta la historia, te resultarán de lo más interesantes. Se trata de monumentos, museos y centros culturales como la Villa de los Artistas, el Centro de Arte Canario, la Casa del Inglés… Además, todos estos lugares han sido acondicionados recientemente para abrirse al público, y las construcciones a visitar están unas muy cerca de las otras, por lo tanto, puedes hacer el recorrido completo andando tranquilamente.
Junto a estos sitios que acabamos de mencionar, en Fuerteventura hay tres monumentos de visita obligada, y que detallamos a continuación. Apúntatelos a modo de guía y no dudes en conocerlos en algún día de sol de esos que no faltan en la isla porque merece realmente la pena y son unas excursiones culturales muy entretenidas, incluso yendo con niños.
El Castillo El Cotillo
El Castillo El Cotillo es una de esas edificaciones que todo el que viaje a Fuerteventura debería visitar porque es maravilloso. Si tienes la oportunidad, entre baño y baño en la playa, haz una escapada hasta aquí.
Esta fortificación es de principio del siglo XVIII y está en una zona escarpada junto al mar, por lo que las vistas desde este punto son fantásticas. La torre es circular y se accede a ella por una escalera de cantería por la que se pasa a un puente levadizo con sus cadenas de hierro.
Tal es su importancia que el 22 de abril de 1940 fue declarado Monumento Histórico Artístico.
La Casa de los Coroneles
Por su parte, la Casa de los Coroneles fue la principal de Fuerteventura, y su nombre se debe a la familia Cabrera Bethencourt, que ejerció el cargo de Coronel de Milicias Provinciales.
No se conoce con exactitud su fecha de construcción, pero se piensa que fue levantada aproximadamente en la segunda mitad del siglo XVII, aunque su impulso definitivo tuvo lugar en el siglo XVIII, y en el XIX se hicieron algunas reformas.
Como el Castillo El Cotillo, La casa de los Coroneles fue declarada Monumento Histórico Artístico el 13 de junio de 1979.
Molinos de Fuerteventura
Y si hay unos monumentos que llaman poderosamente la atención a todos los turistas que viajan a Fuerteventura, éstos son sus molinos.
Los más ‘famosos son el molino de Antigua-Ampuyenta, el Molino de Antigua-Durazno y el Molino de La Corte. Todos ellos, además de haber sido declarados como Monumentos Históricos Artísticos, también son Bienes de Interés Cultural.
Se trata de los típicos molinos que se visualizan por todo el paisaje de esta isla majorera y que son un claro ejemplo del papel crucial que jugó la agricultura y la producción de cereales en Fuerteventura, ya que en ellos era donde se molían los granos.
¿Has estado en Fuerteventura y has visitado alguno de estos monumentos que recogemos en el post? ¡Cuéntanos!